Melinda Gold (Terminada)

Mide cerca de un metro setenta y cinco de altura, su piel es sumamente blanca, lo cual hace resaltar de sobremanera sus hermosos ojos rojos. Su cara tiene facciones finas y delicadas, pero al mismo tiempo muestran una expresión fría y tenaz, su cabello es largo hasta el final de su espalda de color blanco. Su cuerpo está perfectamente desarrollado  con  músculos  finamente marcados, que le dan una nada despreciable fuerza y una gran agilidad.
Siempre con un porte elegante y movimientos sutiles. Vistiendo siempre hermosas prendas  que adornan elegantemente su envidiable figura.

Suele tener siempre una impresión de aburrida del mundo, al haber sido criada en cuna de diamantes, teniendo siempre todo lo que el oro pudiera comprar se desarrolló como una  persona fría, sin conciencia del dinero, eventualmente al no tener ningún desafío real, quedo con la impresión de que el mundo debía ser más de lo que veía.
Es una persona muy franca, que tiende a mirar a todos por encima del hombro y no por su posición como princesa, sino porque en su  mente ella es un ejemplo de persona, para ella el dinero no es un factor que decida a una persona, sino por sus acciones. Si te considera inferior prepárate para conocer a una persona odiosa, seca, fría, abusiva y nada agradable, si te considera su igual, estas ante la persona más gentil, animada y confiable que puedas conocer, y si te considera superior a ella, podrás ver  al ser más leal y entregado de la tierra, mas sin embargo mientras te juzgas solo veras una persona sin emociones o algún tipo de gesto en especial.
Melinda cuenta con valores bien definidos y un carácter que no se presta para segundas oportunidades, lleno de una elegante disciplina que muestra en todas sus acciones.

En algún momento has escuchado el mito del famoso Rey Midas ¿Verdad?, aquel hombre codicioso que uso la magia para convertir todo en oro, pues la historia es un poco diferente, Midas fue un rey de un país lejano a magnolia, una pequeña isla llamada Gress, ya hace unos siglos, el cual busco durante toda su vida una magia que le diera todo el oro que deseara durante las épocas de hambruna, lamentablemente para el cuándo la descubrió no pudo controlarla y termino convirtiendo todo lo que tocaba en oro, y bueno ya saben cómo termino, murió de hambre al no poder comer nada. Mas sin embargo sus hijos no fueron convertidos en oro… bueno por lo menos no todos y de esa forma heredaron toda la fortuna creada por su padre junto con una hermosa estatua de oro de su madre.
La avaricia se hereda, si no, no encuentro otra explicación, los hijos del rey Midas continuaron explorando la magia que su padre creo, con algunos tropiezos en el camino lograron crear algo digno de ser llamado una disciplina mágica, a la que bautizaron “Magia de Midas”, una magia capaz de convertir lo que toques en lo que más desees… Bueno casi.
La magia de Midas se mantuvo guardara celosamente como un tesoro familiar y solo la familia real de Gress, la casa Gold podía dominar. De esta forma llegamos a la última generación de la casa real, conformada por tres hermanos, el mayor de 25 años y heredero al trono, una pequeña de apenas 10 años, y de quien venimos hablar, la hija de en medio Melinda Gold de 19 años.
Malinda, nacida en una época de prosperidad en la  pequeña isla, nunca tuvo que afrontar ninguna carencia, y creció siendo educada como toda una princesa. A la edad de 5 años tal como lo marca la tradición, Melinda fue educada en las artes de pelea y  la famosa magia de Midas. Cumpliendo como reloj sus entrenamientos y clases, y con un esfuerzo nada especial logro cumplir las expectativas de sus familia, sin enfrentar ningún reto en especial.
Su padre, el rey de Gress, siempre la trato como su niña consentida, dándole dulces por debajo de la mesa y defendiéndola de los regaños de su madre, aunque realmente nunca se fijó si su padre era así con sus hermanos, y realmente no le importaba. Su madre al ser la hija del rey anterior, siempre fue más estricta con ella y sus hermanos,  si bien era una madre cariñosa cuando debía serlo,  daba mucho miedo cuando se enojaba, haciendo que incluso ahora Melinda tiemble de pensar en que su madre le alce la voz. Su hermano mayor, siempre fue mi apegado a ella, al punto que incluso podrías decir que tiene un complejo de hermana con sus dos encantadoras hermanas.  La más pequeña  fue motivo de discordia cuando era pequeña, ya que como toda niña sentía que la desplazaba, haciendo de esta forma sus primeros años de vida de hermana un completo infierno, molestándola cada vez que tenía oportunidad, todo hasta que en una ocasión una de sus bromas provoco que la pequeña niñita de 8 años en ese entonces quedara colgando de un acantilado, Melinda sufrió horrores al salvarla, pero lo logro al final, mas no sin antes romperse su brazo derecho, la joven princesa necesito ese acto para darse cuenta de lo importante que era su hermana para ella, aun que por alguna razón su hermanita siempre la vio cómo su objetivo, la persona mas grande el planeta, cosa que solo alimentaba su ego.
Con toda su vida en la isla, comenzaba aburrirse, y escuchando las historias del continente, acerca de peleas de magia y grandes enfrentamientos, decidió partir hacia Magnolia, con la bendición de sus padres, el llanto de sus hermanos y acompañada de su fiel sirviente / amigo Kero. La pequeña Melinda recién llega a esta tierra que le promete emoción, grandes peleas y sobre todo aventura, con una frente en alto, ella busca tal vez un gremio, un buen par de amigos y quizás algo más.