Conectarse
Últimos temas
El skin de style Blue es del creador Shoei, quién es el webmaster Keisuke Bishamon, esté skin fue diseñado única mente para este foro de Fairy Tail, si se nota algún robo o algo se denunciará (¡Se original!). Las imágenes usadas aquí, no son del staff, excepto algunos dibujos que hayan creado u algo, mientras lo demás no es de nosotros, se agradece ah: Google, ZeroChan, Deviantart y a sus dibujadores de fan art. El anime y manga donde estamos usando la temática es de Fairy Tail del creador: Hiro Mashima-sama. La historia donde estamos situada es del manga/anime, no obstante tiene algunas modificaciones y cosas agregadas.
Las imágenes usadas aquí (editadas) son del foro, básica mente nos pertenece de está manera, si lo tomas es robo, puedes tomarlas de algún lado y hacer tu propias modificaciones, ¡Se autentico!, las tablillas usadas del foro también son de Shoei a excepciones las que salgan tablillas con otro crédito que no sean de él.
Agradecemos también a FA (ForoActivo) sin ellos no hubiera posible esto ¡GRACIAS!.
Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
2 participantes
Página 1 de 1.
Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
Dos horas. Nos había tomado dos horas llegar hasta Hosenka para que al final nos digan que no se encuentran lugares disponibles. Estuvimos encerrados en ese tren tan incomodo durante dos horas sin hacer nada; la comida ni siquiera llamaba mi atención por tanta cantidad de insectos sobre ella, solo a Spike parecía gustarle, maldita tortuga afortunada. Ni si quiera confiaba en los baños públicos que se encontraban en el; y por culpa de eso, ahora contraía ambas piernas hacia mi cuerpo con toda la fuerza que me había quedado del viaje para aguantar las ganas de ir al baño. Las reservaciones nunca fueron mi especialidad. Hasta donde yo se, ni siquiera tengo una especialidad.
Coloqué a Spike sobre mi cabeza porque seguramente ya estaba harto de ser asfixiado por mis torpes brazos que inconscientemente apretaban con más fuerza a la tortuga cada vez que continuaba mi caminar. Necesitaba un baño urgentemente. Por ahora no me importaba la habitación, solo quería un baño. Ya ni siquiera me importaba si estaba limpio o no. No, tacharé eso, SI me importaba que estuviese limpio. Había leído un libro acerca de las enfermedades que podías contraer en los lugares públicos, sobre todo en los baños, y no pensaba arriesgarme en contraer una enfermedad en mi viaje. Sería un desperdicio de vacaciones.
Aunque no eran precisamente vacaciones. Me habían dicho que una hermosa mujer estaba aprovechándose de su físico afortunado para atraer a cualquier hombre que se le apetecía para luego drenar por completo su sangre. Estoy segura de que es él. Incluso a pesar de los años, el modus operandi de Roa nunca cambia.
–Baño–salí de mi trance. Me había quedado inmóvil por escasos 2 minutos al recordad el nombre de Roa. Ahora devuelta al trance del baño. Encorvé mi cuerpo apretando con mas fuerza mis piernas y comencé a dar pequeños saltos mientras giraba agresivamente mi cabeza por todas partes en búsqueda de un baño.
Pasé por tiendas de todo tipo y preguntaba si al menos había llevado consigo baños portátiles pero al parecer solo los consumidores podía usarlo. No podía darme el lujo de gastar mi dinero, mucho menos en cosas que jamás usaría. Lo peor era cuando pasaba por los lagos o ríos de Hosenka. Cada vez que miraba aquellas hermosas aguas me daban muchas más ganas de ir al baño.
– ¿Qué hago Spike? –miré hacia arriba para poder visualizar mejor a la tortuga esperando alguna respuesta positiva de ella. La muy desgraciada solo gruño. –Muchas gracias por el consejo, reptil inútil–. Volvió a gruñir y simplemente me ignoro. A lo lejos pude ver mi salvación. Un baño público con los carteles de hombre/mujer sobre las puertas. No dude, ni siquiera respire. Lo único que hice fue moverme a gran velocidad hacia los baños sin prestar atención a mis alrededores. Aún si empujaba a las personas, me era muy difícil acercarme hacia ellos. Parecía que algún festival estaba sucediendo precisamente en el lugar que más necesitaba estar. Por suerte llegué. Mis ojos brillaron al notar el letrero de “mujeres” frente a mí. Me acerqué lentamente hacia la entrada hasta tocar la perilla de la puerta…
– ¡Hey tú! –una persona me había gritado a lo lejos. Giré para notar a una señora regordeta bastante furiosa parada frente al baño. Hice una mueca. No comprendía porque se había enfadado. A menos que fuera ofensivo usar el baño sin permiso. –Niña, vete al final de la fila. No eres la única con las ganas de ir. ¡Espera como todas!
Me asomé a la dicha fila. ¡Era enorme! ¿A qué clase de gente se le fue a ocurrir poner un solo baño en todo el festival? Al menos deberían poner baños portátiles, es lo que menos se espera la gente que haya. O por lo menos es lo que espero yo. Como no me quedaba de otra, fui hasta al final de la fila a pesar de que ya no aguantaba las ganas. –Spike, no creo poder aguantar más tiempo. Tengo que ir al baño o explotaré. –Encorvé aún más mi cuerpo al mismo tiempo que contraía mis piernas entre sí para evitar accidentes. No se sabía al principio si mi postura llamaba la atención, pero creo que de no haber sido por eso un señor de mayor edad se me acercó mostrando un rostro lleno de lastima y desconsuelo. –Pequeña, ¿tienes muchas ganas de ir al baño?
–No pienso usar su urinal, señor, tengo mis limites–aunque un orinal no sonaba tan mal a estas alturas. El señor simplemente rió, entonces nos miramos Spike y yo confusos de semejante reacción. Hizo una señal para que me acercara y me susurró al oído. –“Tengo la ropa de mi nieto que se le olvidó el otro día. Tiene más o menos tu edad, si te interesa”. –Si soy honesta, no entendí nada de lo que había dicho hasta que señaló el baño de varones. Un paraíso. No había fila, y lo mejor, parecía estar completamente vació. Los hombres entraban y salían tan rápido del lugar pareciendo que ni siquiera lo utilizaban. En cambio miraba aterrada la fila de mujeres, y simplemente no podía más. Di una última mirada al baño de varones y luego al anciano accediendo a su oferta. Sacó una bolsa de su gabardina y me la entregó. No se si se iba a deshacer de la ropa o a devolverla, pero el caso es que la traía consigo para mi suerte. Le agradecí el gesto y me dijo donde encontrarlo para devolverla una vez que terminara. Corrí hasta la parte trasera de los baños y me coloqué la ropa. Unos pantalones negros sumamente flojos que tuve que ajustar con el cinturón que venía con ellos, una playera de manga larga que por suerte cubría por completo mi busto y una cachucha roja con una paloma de aprobación blanca en medio de ella. De no ser por la cachucha, no sabría lo que hubiera hecho con mi cabello. Le pedí a Spike que me revisara para ver si faltaba algo y me gruñó dos veces lo cual significaba su aprobación en nuestro idioma. No perdí más tiempo y me fui directo al baño dejando a Spike a cargo de la bolsa donde venía la ropa. Si las mujeres lo veían, hubieran sospechado que era yo.
Llegué hasta la entrada y vigilé que nadie sospechara de mi, aunque eso hacía que luciera más sospechosa de lo que ya parecía. Finalmente, y dándole un último vistazo a la fila de mujeres, entré sin vacilar. Nunca había entrado al baño de hombres, así que me sorprendí bastante al notar una extrañas cosas pegadas frente a la pared. Dos hombres estaban frente a ellas mirando fijamente hacia la pared. ¡Despierta Arcueid! ¡No tienes tiempo para esto! Era como si mi vejiga gritara mi nombre con cada contracción que hacía. Giré y entre al primer baño vació que encontré realizando el trabajo. Al fin paz.
Salí del baño estirando ambos brazos y piernas en símbolo de relajación. Era la única manera de sentirme aliviada después de tanto estrés. Caminé de manera tan ligera hasta los lavabos mientras tarareaba una canción al introducir mis manos enjabonadas en la fresca y fría agua. Sacudí mis manos cuando terminé de lavármelas y busqué las toallas desechables para secarlas las cuales estaban ubicadas en una pequeña esquina. Estaba apunto de ir por ellas de no ser porque alguien se me atravesó y por el movimiento tan brusco que hizo caí directamente al suelo. Observé a la persona frente a mí que no dejaba de mirarme. Era un varón. Había olvidado por completo que me encontraba en el baño de hombres. Deseé que mi cachucha se encontrase aún en mi cabeza, pero al parecer había caído al mismo tiempo que tocaba el suelo. Ahora si me encontraba en problemas.
Arcueid Crimson- Rango D
- Mensajes : 165
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
Me encontraba justamente caminando en dicho lugar donde los puestos de comida, bares, tiro al blanco, atrapar a los peces entre otras cosas mas se encontraban completamente llenos de pura gente causando que pareciera que fuera una feria oriental de aquellos asiáticos que estaban siempre con sus atuendos de kimono entre otras cosas. En mi mundo de Edoras no conocía este tipo de cosas, sin embargo ya que había estado tanto tiempo en Earthland, yo conocía este mundo y por lo tanto no tendría ningún problema en que los mirase raros o tal vez con algo de impresión, para mi esto ya era normal.
Estando en dicho lugar estaba descansando de todo lo que me tenia atareado, papeles, gobernar y tener muchas responsabilidades en aquel mundo, no solo eso, problemas en el cual alguien había abierto dicho portal de nuevo y esto no me agradaba para nada en lo absoluto, tan solo quería averiguar que pasaba, pero solo estaba de vacaciones por unos pocos días para asi volver a estar en mi puesto y hacer mis deberes.
Tan solo pensaba en mi propio hijo quien estaba en el castillo por el momento quedándose en su cuarto jugando con aquellos juguetes que tal vez no se aburriría nunca, por momentos pensaba que el hubiese venido conmigo, pero desgraciadamente por las cosas extrañas y por lo que había oído de de el gremio the Demons mas el intento de resurgir Fairy Tail me dejaba inquieto que algo le sucediese estando aquí. Estaba mas seguro en el reino de Edoras aunque también tenia sus propios problemas como las delincuencias, secuestros entre otras cosas mas, típico de una ciudad que usualmente se encuentra con este tipo de cosas. Afortunadamente este tipo de situaciones estaba en escasos en mi reino.
Fui por un momento al baño publico para asi hacer mis propias necesidades, no obstante había notado que las pobres chicas esperaban una gran fila grandísima para entrar a dicho lugar donde las mujeres a veces se tardaban, no entendia el por que esta mania de quedarse dentro, pero a mi eso no me importaba a la vez, era normal y por lo tanto ingrese a dicho lugar de los hombres.
No había absolutamente nadie ya que dos se habían retirado del lugar, terminando de hacer mis necesidades, fui a lavarme las manos sin ningún problema para asi por momentos mirarme al espejo, no me percate que había otra persona mas y por lo tanto al ir por el papel para secarme las manos me había topado con esa persona haciéndola caer y mirarle sorpresivamente abriendo mis ojos y haciendo mi iris mas pequeño.
-Te encuentras bien?-Dicho esto con preocupación observe mas detenidamente y pude notar que era una chica, no solo eso, también pude ver que esta misma chica se me hacia bastante conocida, me recordaba a aquella joven que había estado en el hotel, aquella noche que no supe que había pasado y tal vez la pobre chica había estado embarazada por aquella estupides que hice de emborracharme junto con ella, pero esta era mas pequeña, tal vez era la hermana o lo peor aun…mi propia hija…pero a la vez era imposible, pues aparentaba tener una edad de 16 o 17 años cosa que era imposible, máximo que pudo haber tenido era 14 años no a mas. Asi que quede paralitico por un momento para asi ladear la cabeza y tomarla de la mano para levantarla-¿Qué hace una chica en el baño de hombres?-Decia medio sonriente pero sorprendido aun-cierto, ahora que recuerdo, hay una ilera grande de chicas para ir al baño suyo-Arqueaba las cejas lo contrario de fruncir para asi cerrar los ojos y tener aun esa sonrisa viéndose que en mi sien una gota de sudor caia con la poca pena que me daba, si, había veces que estaba completamente distraído pensando en otras cosas y por instantes olvidarme de lo que pasaba alrededor mio, cosas insignificantes que no valían tanto la pena. Pero hecho esta acción tuve que mencionarle lo siguiente-Rapido, ponte la cachucha y saldremos de aquí, no vaya hacer un chico pervertido que te vea y quiera hacerte algo mas o piense mal de nosotros-Dije esto con seriedad tomándole de la cintura para asi poderla sacar del lugar y estar completamente bien aquella joven de cabellos rubios que tanto me hacia recordar a la vampira.
Estando en dicho lugar estaba descansando de todo lo que me tenia atareado, papeles, gobernar y tener muchas responsabilidades en aquel mundo, no solo eso, problemas en el cual alguien había abierto dicho portal de nuevo y esto no me agradaba para nada en lo absoluto, tan solo quería averiguar que pasaba, pero solo estaba de vacaciones por unos pocos días para asi volver a estar en mi puesto y hacer mis deberes.
Tan solo pensaba en mi propio hijo quien estaba en el castillo por el momento quedándose en su cuarto jugando con aquellos juguetes que tal vez no se aburriría nunca, por momentos pensaba que el hubiese venido conmigo, pero desgraciadamente por las cosas extrañas y por lo que había oído de de el gremio the Demons mas el intento de resurgir Fairy Tail me dejaba inquieto que algo le sucediese estando aquí. Estaba mas seguro en el reino de Edoras aunque también tenia sus propios problemas como las delincuencias, secuestros entre otras cosas mas, típico de una ciudad que usualmente se encuentra con este tipo de cosas. Afortunadamente este tipo de situaciones estaba en escasos en mi reino.
Fui por un momento al baño publico para asi hacer mis propias necesidades, no obstante había notado que las pobres chicas esperaban una gran fila grandísima para entrar a dicho lugar donde las mujeres a veces se tardaban, no entendia el por que esta mania de quedarse dentro, pero a mi eso no me importaba a la vez, era normal y por lo tanto ingrese a dicho lugar de los hombres.
No había absolutamente nadie ya que dos se habían retirado del lugar, terminando de hacer mis necesidades, fui a lavarme las manos sin ningún problema para asi por momentos mirarme al espejo, no me percate que había otra persona mas y por lo tanto al ir por el papel para secarme las manos me había topado con esa persona haciéndola caer y mirarle sorpresivamente abriendo mis ojos y haciendo mi iris mas pequeño.
-Te encuentras bien?-Dicho esto con preocupación observe mas detenidamente y pude notar que era una chica, no solo eso, también pude ver que esta misma chica se me hacia bastante conocida, me recordaba a aquella joven que había estado en el hotel, aquella noche que no supe que había pasado y tal vez la pobre chica había estado embarazada por aquella estupides que hice de emborracharme junto con ella, pero esta era mas pequeña, tal vez era la hermana o lo peor aun…mi propia hija…pero a la vez era imposible, pues aparentaba tener una edad de 16 o 17 años cosa que era imposible, máximo que pudo haber tenido era 14 años no a mas. Asi que quede paralitico por un momento para asi ladear la cabeza y tomarla de la mano para levantarla-¿Qué hace una chica en el baño de hombres?-Decia medio sonriente pero sorprendido aun-cierto, ahora que recuerdo, hay una ilera grande de chicas para ir al baño suyo-Arqueaba las cejas lo contrario de fruncir para asi cerrar los ojos y tener aun esa sonrisa viéndose que en mi sien una gota de sudor caia con la poca pena que me daba, si, había veces que estaba completamente distraído pensando en otras cosas y por instantes olvidarme de lo que pasaba alrededor mio, cosas insignificantes que no valían tanto la pena. Pero hecho esta acción tuve que mencionarle lo siguiente-Rapido, ponte la cachucha y saldremos de aquí, no vaya hacer un chico pervertido que te vea y quiera hacerte algo mas o piense mal de nosotros-Dije esto con seriedad tomándole de la cintura para asi poderla sacar del lugar y estar completamente bien aquella joven de cabellos rubios que tanto me hacia recordar a la vampira.
Mystogan- Rango S
- Mensajes : 12
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
Lo odiaba. Odiaba el baño de mujeres ahora más que nunca. Primero por sus enormes excesos de desodorantes en aerosol para que oliese mejor sin darse cuenta de que solo nos asfixiaba y perjudicaba mucho más. Segundo, por sus filas sin sentido que se iban creando poco a poco en todos los baños públicos. Y tercero, por las personas que creaban las filas. De por sí el baño apestaba a desodorante femenino perjudicador del ambiente, las mujeres tienden a arreglarse como payasos aprovechando el enorme espejo que siempre hay en cada edificio, además de colocarse perfume para competir con el desodorante en aerosol y ver quien contamina más la tierra. Por culpa de ellas, repito, POR CULPA DE ELLAS, ahora estaba frente a un sujeto con finta de asaltante de cabellos azulados y tatuaje en el ojo que había descubierto mi identidad. Vaya suerte la mía. Muy a pesar de que se había preocupado por mi estado, su atuendo de agresor no ayudaba en nada.
Dentro de mi cabeza solo podía escuchar las palabras “Chica en el baño de hombres” que había dicho un poco consternado por ver a una mujer en el recinto de varones. Inclusive había concordado conmigo acerca de la estúpida fila que había allá afuera. No creo que nadie logre pasar por alto semejante masacre femenino. Hasta ahora todo iba bien. No había causado un escándalo y mucho menos me había delatado. Aunque también eso me preocupaba, ¿qué tal si aprovechaba la situación de que una jovencita se encontrase en un baño abandonado? Esa idea realmente no me gustaba. O peor, ¿quién me asegura que no había mandado una señal, mientras me mantenía en shock, a sus compañeros para que llegaran todos y se aprovecharan también de la situación? Solo quiero ver que lo intenten. Hay no, creo que dijo algo de salir de aquí y algún chico pervertido. ¿Estaba tratando de ganarse mi confianza? ¿Se había delatado a si mismo como un acosador de jovencitas? Sea cual sea, había propuesto salir de aquí y con eso me bastaba para seguirle la corriente. Tomé la cachucha a toda prisa y escondí mi cabello sin dejar un solo rastro de femineidad dejándome llevar por el joven para salir de una vez de este maldito lugar. Ya me encargaré de él cuando salgamos de aquí.
Una vez afuera, miré despreocupada por el rabillo del ojo la fila de mujeres que aún no desaparecía. Sonreí. Me dan tanta lastimas las mujeres que solo quieren entrar al baño y no arreglarse. Tal vez deberían crear su propio baño llamado “Mujeres-Desaliñadas” y la misma imagen de mujeres pero desarreglada. Volví a mirar al joven que me había sacado y continué mi camino. –Sígueme–debía llevarlo hasta donde estaba Spike para devolverle la ropa al anciano. No tenía ninguna prisa con agradecerle, pero si me urgía liberarme de este sujeto que no dejaba de mirarme de manera sospechosa, como si le hubiera arrebatado algo de gran importancia o escondido algo que tenía ganas de saber.
–Hola Spike, perdón por la tardanza–el solo me gruñó. Pero gruñó aún más cuando vio al joven que me acompañaba, no le gusta verme con gente extraña y no lo culpo. –No te preocupes, no nos hará daño. No es así, ¿joven…señor….encapuchado? –a mi edad cualquiera es grande, así que no espero que se moleste por haberle anotado un par de años a su vida. Tomé la bolsa que le había encargado a Spike y se la di al joven mientras me quitaba la cachucha y colocaba a Spike sobre mi cabeza. Le dije que tenía que devolver la ropa que llevaba puestas y no pienso cambiarme frente a él. Iríamos al local que tenía el mismo logotipo que la bolsa que se me había entregado por mera indicación. Fue el único indicio que me dijo para poder encontrarle pues mi vejiga no contaba con el tiempo de mayores indicaciones. –Eres libre de ir si no lo deseas, aunque te debo una por sacarme de allí–caminé hasta la zona de locales deseando que el sujeto no me siguiera pues me estaba poniendo nerviosa y a Spike mucho más.
Arcueid Crimson- Rango D
- Mensajes : 165
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
Ya estando por las afueras y lejanías de aquel lugar donde las chicas estaban haciendo su hilera tan gigante para asi entrar al baño, decidi perseguir aquella joven de cabellos rubios dado a que me lo había pedido, no obstante teniendo mis ropajes de que no me viera nadie me veía algo extraño entre la gente por lo que divage un poco sobre mi mente pensando en unas cosas que….ustedes sabran, de inmediato mis mejillas se ruborizaron de la pena y ladee la cabeza para que esas ideas se me quedaran congeladas y no pensara mas en eso.
Llegamos entonces a nuestro destino y una tortuga que al parecer no le caia para nada bien ya que me miraba con ojos de furia causando que le mirara extraño y a la vez se me cayera una gota en la sien-que me mira esta tortuga tan extraña- Decia sobre mi cabeza para asi quedarme en silencio por un poco de tiempo. Mire a la rubia chica que me dijo encapuchado, si si tenia el derecho de mirarme de forma extraña ya que tenia mis razones para hacerlo asi que me sobe un poco la nuca para mirar a otro lado- Debo decir que siento mucho que este vestido asi pero no dare ningún daño-Hecho esto le sonreí aquella joven de ojos cafes para sonreírle un poco mas asi que pude notar que se llevaba a su pequeña tortuga a su cabeza para asi decirme que no iba a cambiarse enfrente de mi. Esto me causaba cierta curiosidad ya que aun me intrigaba que la jovencilla esta fuera Arcueid, la aquella joven que había estado en ese hotel que nos habíamos divertido mucho y que tal vez….bueno supongo que no explicare detalles. Pero de cierto modo tenia ganas de volverla a ver para asi divertirnos como en aquella ocasión o simplemente para ver como estaba y se encontraba.
Decidi seguirla entonces para asi que ella misma se adentrara a los locales, pero mis ojos no dejaban de clavar la mirada hacia ella estaba tentando por la mismo asi miraba hacia otro lado para ya dejarla un poco mas.-Oye, debo admitir que estando vestida bien llamas la atención de cualquier hombre que ya sabe que eres una mujer- Decia frunciendo un poco las cejas con un poco de vergüenza y mis mejillas tan solo se volvían rojos notándose asi un poco en el pañuelo que me tapaba la boca.
Llegamos entonces a nuestro destino y una tortuga que al parecer no le caia para nada bien ya que me miraba con ojos de furia causando que le mirara extraño y a la vez se me cayera una gota en la sien-que me mira esta tortuga tan extraña- Decia sobre mi cabeza para asi quedarme en silencio por un poco de tiempo. Mire a la rubia chica que me dijo encapuchado, si si tenia el derecho de mirarme de forma extraña ya que tenia mis razones para hacerlo asi que me sobe un poco la nuca para mirar a otro lado- Debo decir que siento mucho que este vestido asi pero no dare ningún daño-Hecho esto le sonreí aquella joven de ojos cafes para sonreírle un poco mas asi que pude notar que se llevaba a su pequeña tortuga a su cabeza para asi decirme que no iba a cambiarse enfrente de mi. Esto me causaba cierta curiosidad ya que aun me intrigaba que la jovencilla esta fuera Arcueid, la aquella joven que había estado en ese hotel que nos habíamos divertido mucho y que tal vez….bueno supongo que no explicare detalles. Pero de cierto modo tenia ganas de volverla a ver para asi divertirnos como en aquella ocasión o simplemente para ver como estaba y se encontraba.
Decidi seguirla entonces para asi que ella misma se adentrara a los locales, pero mis ojos no dejaban de clavar la mirada hacia ella estaba tentando por la mismo asi miraba hacia otro lado para ya dejarla un poco mas.-Oye, debo admitir que estando vestida bien llamas la atención de cualquier hombre que ya sabe que eres una mujer- Decia frunciendo un poco las cejas con un poco de vergüenza y mis mejillas tan solo se volvían rojos notándose asi un poco en el pañuelo que me tapaba la boca.
Mystogan- Rango S
- Mensajes : 12
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
No lo podía creer, el sujeto había decidido seguirme a toda costa. No entiendo porque lo hace, ¿acaso le hice algo? Si pudiera recordar algo de mi pasado tal vez podría identificarle. Aunque dudo mucho que el haya estado involucrado conmigo de alguna manera, se ve demasiado extraño para mis gustos. –No apreciare tus gustos en la moda, pero si te hace feliz vestirte de esa manera, adelante–aunque debo admitir que tan solo verlo me producía insolación. A Spike también parecía desagradarle el que nos siguiera alguien de muy malos gustos en trapos y no encontraba la manera de calmarlo. Y luego dijo algo que no a él ni a mí nos agrado.
– ¿Tiendes a seducir jovencitas de menor edad? –pero de ser sincera, me sonroje bastante por lo que dijo así que giré mi rostro en dirección opuesta para que no lo notara. No me había fijado que habíamos llegado a la zona donde se encontraba el local del señor. El letrero de su tienda era bastante llamativo así que dimos con el más rápido de lo que pensé. Mientras entrábamos, una pequeña campanita sonaba dando alusión de que habíamos llegado; vendían antigüedades de todo tipo en muy buen estado, en cuanto le entregue la ropa al señor seguro que revisaría de pies a cabeza el lugar. Una señora, no muy grande, atendía el local con una enorme sonrisa a pesar de la poca clientela y junto a ella se encontraba anciano quien me dio una señal y le seguí hasta la parte trasera de lugar oculta tras una cortina morada. Pero entonces recordé que tenía a Spike y venía acompañada, me acerqué hasta el joven encapuchado y le entregué a Spike deseando que no lo mordiera–Te lo encargo. Espero no tardarme mucho, regresaré lo antes posible–le di un par de caricias a la tortuga gruñona y le dedique una sonrisa al joven que ahora tenía a mi bien más preciado en sus manos. Regresé hasta donde se encontraba la cortina notando que inclusive la parte trasera era llamativa. Me recordaba a las casas antiguas llenos de relojes de cuerda y tapetes de diferentes colores. A plena vista, se podía apreciar la sala de color vintage donde había una enorme ventana que muy apenas y entraba la luz. Tal vez por la ubicación.
–No me gusta mucho la luz, hace que se pierda la magia en mi tienda–me decía mientras se sentaba en una silla roja con detalles dorados y servía un poco de té; y mientras lo hacía, dejé la bolsa en uno de los sillones del mismo color de la silla y realizaba una ademán de agradecimiento–Gracias por la ropa. Me sirvió mucho–hizo un pequeño gruñido que no supe como tomarlo y luego rió. Creo que eso no sería una risa, era más bien una carcajada. Me quedé prácticamente inmóvil. No sabía como actuar ante semejante situación. Miré varias veces la cortina morada en dado caso de que necesitara de una huida repentina. Sirvió más té pero en una taza aparte y me la entregó, le di una mirada de asco, la verdad es que no me gusta mucho esta bebida.
–Veo que pudiste hacer tus necesidades sin problemas, incluso te conseguiste un novio. Los jóvenes de ahora si que saben romper el hielo–estuve apunto de colapsar. ¡No me lo podía creer! Cerré los ojos y respire hondamente. Luego miré de manera inconsciente y de forma vil al anciano que me había insultado. –Señor…creo que le voy a adelantar la fecha de su deceso. –A juzgar por la mirada del anciano, pareció tomar muy a la ligera mi amenaza, muy a pesar de que lo estaba diciendo bastante enserio. Se levantó de su asiento y tomó la bolsa que había dejado en el sillón verificando que estuviera todo en su lugar; ya satisfecho con mi buena responsabilidad, golpeo un par de veces mi espalda y me llevó hasta la tienda junto al encapuchado nuevamente. –Siéntanse libres de comprar cualquier cosa. Pueden encontrar los anillos de compromiso en las estanterías–me sonrojé e incluso Spike se había quedado sin habla. Tomé aire hasta dejar mis mejillas lo suficientemente llenas y dejé salir un grito aturdidor: –¡NO ES MI NOVIO! ¡ES UN PERVERTIDO!
– ¿Tiendes a seducir jovencitas de menor edad? –pero de ser sincera, me sonroje bastante por lo que dijo así que giré mi rostro en dirección opuesta para que no lo notara. No me había fijado que habíamos llegado a la zona donde se encontraba el local del señor. El letrero de su tienda era bastante llamativo así que dimos con el más rápido de lo que pensé. Mientras entrábamos, una pequeña campanita sonaba dando alusión de que habíamos llegado; vendían antigüedades de todo tipo en muy buen estado, en cuanto le entregue la ropa al señor seguro que revisaría de pies a cabeza el lugar. Una señora, no muy grande, atendía el local con una enorme sonrisa a pesar de la poca clientela y junto a ella se encontraba anciano quien me dio una señal y le seguí hasta la parte trasera de lugar oculta tras una cortina morada. Pero entonces recordé que tenía a Spike y venía acompañada, me acerqué hasta el joven encapuchado y le entregué a Spike deseando que no lo mordiera–Te lo encargo. Espero no tardarme mucho, regresaré lo antes posible–le di un par de caricias a la tortuga gruñona y le dedique una sonrisa al joven que ahora tenía a mi bien más preciado en sus manos. Regresé hasta donde se encontraba la cortina notando que inclusive la parte trasera era llamativa. Me recordaba a las casas antiguas llenos de relojes de cuerda y tapetes de diferentes colores. A plena vista, se podía apreciar la sala de color vintage donde había una enorme ventana que muy apenas y entraba la luz. Tal vez por la ubicación.
–No me gusta mucho la luz, hace que se pierda la magia en mi tienda–me decía mientras se sentaba en una silla roja con detalles dorados y servía un poco de té; y mientras lo hacía, dejé la bolsa en uno de los sillones del mismo color de la silla y realizaba una ademán de agradecimiento–Gracias por la ropa. Me sirvió mucho–hizo un pequeño gruñido que no supe como tomarlo y luego rió. Creo que eso no sería una risa, era más bien una carcajada. Me quedé prácticamente inmóvil. No sabía como actuar ante semejante situación. Miré varias veces la cortina morada en dado caso de que necesitara de una huida repentina. Sirvió más té pero en una taza aparte y me la entregó, le di una mirada de asco, la verdad es que no me gusta mucho esta bebida.
–Veo que pudiste hacer tus necesidades sin problemas, incluso te conseguiste un novio. Los jóvenes de ahora si que saben romper el hielo–estuve apunto de colapsar. ¡No me lo podía creer! Cerré los ojos y respire hondamente. Luego miré de manera inconsciente y de forma vil al anciano que me había insultado. –Señor…creo que le voy a adelantar la fecha de su deceso. –A juzgar por la mirada del anciano, pareció tomar muy a la ligera mi amenaza, muy a pesar de que lo estaba diciendo bastante enserio. Se levantó de su asiento y tomó la bolsa que había dejado en el sillón verificando que estuviera todo en su lugar; ya satisfecho con mi buena responsabilidad, golpeo un par de veces mi espalda y me llevó hasta la tienda junto al encapuchado nuevamente. –Siéntanse libres de comprar cualquier cosa. Pueden encontrar los anillos de compromiso en las estanterías–me sonrojé e incluso Spike se había quedado sin habla. Tomé aire hasta dejar mis mejillas lo suficientemente llenas y dejé salir un grito aturdidor: –¡NO ES MI NOVIO! ¡ES UN PERVERTIDO!
Arcueid Crimson- Rango D
- Mensajes : 165
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
Seguia caminando a lado de ella, parecía ser que era una chica algo seria pero no del todo la veía de esa manera, su forma de caminar me recordaban a Arcueid Brunestud de aquella ocasión en la cual la vi en akane resort en esa ocasión. Fue cierto que me había enamorado de tal joven hermosa de cabello corto y ojos cafes pero sabia que cuando la volveria a ver ya no seria tan igual o mi intuición me decía eso.
Llegando a un local de antigüedades donde habían armaduras, Espadas, mascaras entre otras cosas muy valiosas me quede perplejo ante todo lo que veía, era bastante interesante y muy buen lugar, habían cosas que no había conocido, tal vez por que provenia de una dimensión distinta a la de Earth land, pero todo se me hacia fascinante, tenia la boca abierta y tratando de decir un wow, pero quede en silencio solamente abri la boca un poco. La misma joven me había dejado a spike, la tortuga gruñona que no le agradaba para nada, esto si que iria hacer un gran problema, lo tome con las manos para que se quedara conmigo mientras que ella iria hacer pendientes con cierto viejito que le había hecho el ademan de venir a la parte trasera de su tienda.
Seguia observando las cosas que se encontraban en las retinas para ver los detalles que cada artefacto tenia. No faltaba las preguntas que le hacia a la viejita que se encontraba vigilia en la tienda mostrándome asi unas cosas aunque spike parecía ser que seguía gruñéndome, esto no me agradaba para nada y me incomodaba un poco.
Observando cierta mascara vi que la chica de cabellos rubios salía algo molesta puesto que se había puesto a lado mio. La mire por un momento para decirle en voz baja-estas bien? Te veo algo molesta- El viejito entonces hablo diciéndonos que se encontraban unos anillos de compromiso en una de las estanterías provocando que me pusiese algo nervioso provocando que temblara por un instante, sonrojándome y notándose en mis mejillas ese rojo que se podía apreciarse, gracias al cielo tenia mi paleacate puesto para que no se me notara tanto el rostro.-No no se equivoca no soy novio de ella ni nada en lo absoluto-Decia moviendo mis manos hacia enfrente de un lado a otro con una gota en mi sien de sudor ya que le estaba mal interpretando aquel viejito que ayudo a esta joven chica.
Llegando a un local de antigüedades donde habían armaduras, Espadas, mascaras entre otras cosas muy valiosas me quede perplejo ante todo lo que veía, era bastante interesante y muy buen lugar, habían cosas que no había conocido, tal vez por que provenia de una dimensión distinta a la de Earth land, pero todo se me hacia fascinante, tenia la boca abierta y tratando de decir un wow, pero quede en silencio solamente abri la boca un poco. La misma joven me había dejado a spike, la tortuga gruñona que no le agradaba para nada, esto si que iria hacer un gran problema, lo tome con las manos para que se quedara conmigo mientras que ella iria hacer pendientes con cierto viejito que le había hecho el ademan de venir a la parte trasera de su tienda.
Seguia observando las cosas que se encontraban en las retinas para ver los detalles que cada artefacto tenia. No faltaba las preguntas que le hacia a la viejita que se encontraba vigilia en la tienda mostrándome asi unas cosas aunque spike parecía ser que seguía gruñéndome, esto no me agradaba para nada y me incomodaba un poco.
Observando cierta mascara vi que la chica de cabellos rubios salía algo molesta puesto que se había puesto a lado mio. La mire por un momento para decirle en voz baja-estas bien? Te veo algo molesta- El viejito entonces hablo diciéndonos que se encontraban unos anillos de compromiso en una de las estanterías provocando que me pusiese algo nervioso provocando que temblara por un instante, sonrojándome y notándose en mis mejillas ese rojo que se podía apreciarse, gracias al cielo tenia mi paleacate puesto para que no se me notara tanto el rostro.-No no se equivoca no soy novio de ella ni nada en lo absoluto-Decia moviendo mis manos hacia enfrente de un lado a otro con una gota en mi sien de sudor ya que le estaba mal interpretando aquel viejito que ayudo a esta joven chica.
Mystogan- Rango S
- Mensajes : 12
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
Sin lugar a dudas los ancianos son las personas más entrometidas después de los niños, no…creo que incluso superan a los infantes. Traté de olvidarme de lo que había dicho el anciano pero parecía que al encapuchado le gustaba recordarme las cosas que más detestaba. No era de mucha ayuda cuando más se necesitaba. –No sucedió nada que sea de tu incumbencia–al menos para algo si servía. Después del ofrecimiento de anillos, que eran bastante hermosos a pesar de su significado, ambos rechazamos su extraña forma de demostrar amabilidad, pero inconsciente insulto, cada quién a su manera. Mientras el se comportaba de forma amable yo intentaba no explotar de todas las formas posibles. –Creame señor, este pervertido es todo menos mi novio. Aunque…–recordé uno de los libros que había leído ubicados en el ático de la casa. No entendía porque la vieja gruñona los mantenía escondidos en aquel lugar si eran bastante informativos sobre la anatomía humana. Observé nuevamente su forma de vestir además de su complexión; lucia exactamente al protagonista de aquellos libros ocultados. Así que, bien podría no ser mi novio, pero si otra cosa. –El es mi esclavo sexual.
El lugar había enmudecido. La señora que atendía había dejado caer unas bolsas que estaba acomodando. A juzgar por su rostro enrojecido, debió obtener una fiebre muy alta y por la presión no pudo sostener su pedido. Pero no explicaba porque los varones se encontraban con el mismo rostro. Tal vez había un virus suelto por ahí. –Deberían ir al doctor, la fiebre no es muy común en esta época del año.
–Niña… ¿cuántos años tienes? –preguntó el anciano ahora bastante confuso y con mayor enrojecimiento. Me puse a pensar. Realmente no lo recordaba, pero si quería mantener mi perfil bajo debía elegir una edad aproximada a mi apariencia así que indagué en los muchos libros que había leído sobre jóvenes. –Tengo…14 años–decía mientras tomaba a Spike entre mis manos nuevamente. El anciano ahora había palidecido, esa fiebre de verdad que es peligrosa, hace que tu rostro cambie de color en cuestión de segundos. –Eres…demasiado…joven–el señor miraba de una manera aterradora al encapuchado y en vez de decir algo simplemente se giró y volvió a la parte trasera del local. Miré a mis alrededores y preferí darle un vistazo a las cosas antes de irme. La señora aún continuaba convertida en piedra y sin recoger las bolsas. –Spike, ¿te gusta algo? – parecía que estaba cansado, ni siquiera había hecho una mueca desde que lo sostuve. –Entonces le preguntaré al pervertido–miré al encapuchado y justo en el instante en que volteaba un resplandor llamó mi atención y por si fuera poco mis piernas comenzaron a moverse por si solas en su dirección. Parecía una palomilla que iba directo a su muerte.
Puse a Spike sobre mi cabeza y tome el objeto brillante entre mis manos. Era un bonito alhajero hecho de cristal, pero no cualquier cristal, un bonito cristal color aqua. Lucía realmente hermoso. Podía notarse a través de el un pequeño motor y las pequeñas cerdas junto a el para tocar una melodía, una melodía que preferí no escuchar hasta llegar el momento adecuado. Pero esa no fue la razón por la cual llamó mi atención, si no por un pequeño símbolo ubicado en la parte trasera de la cajita. El símbolo del Millennium Castle estaba tan perfectamente bien diseñado que incluso hacia alusión de que fue diseñado para alguno de los integrantes del antiguo gremio oscuro. Esa caja debía ser mía. –Spike, no creo en el destino. Pero solo por esta vez creeré en él.
Fui a la caja registradora y solicité el costo de el único artefacto que había mantenido con vida el nombre de mi familia. Quizás no logre encontrar otro igual. Aunque el costo de dicho tesoro me haya caído como balde de agua fría, tuve la suerte de contar con la cantidad exacta para comprarlo. O eso creí. – ¡¿En dónde está?! –grité mientras buscaba la ubicación de mi cartera. No podía encontrarla por ninguna parte. Incluso me puse en cuclillas para buscar en el suelo por si la había tirado pero no se encontraba ahí. Solo espero que no la haya dejado en los baños al momento de cambiar. O peor, que algún lunático quiso pasarse de listo al robarme el dinero que había juntado en mis misiones.
Este día no se puede poner más del asco.
El lugar había enmudecido. La señora que atendía había dejado caer unas bolsas que estaba acomodando. A juzgar por su rostro enrojecido, debió obtener una fiebre muy alta y por la presión no pudo sostener su pedido. Pero no explicaba porque los varones se encontraban con el mismo rostro. Tal vez había un virus suelto por ahí. –Deberían ir al doctor, la fiebre no es muy común en esta época del año.
–Niña… ¿cuántos años tienes? –preguntó el anciano ahora bastante confuso y con mayor enrojecimiento. Me puse a pensar. Realmente no lo recordaba, pero si quería mantener mi perfil bajo debía elegir una edad aproximada a mi apariencia así que indagué en los muchos libros que había leído sobre jóvenes. –Tengo…14 años–decía mientras tomaba a Spike entre mis manos nuevamente. El anciano ahora había palidecido, esa fiebre de verdad que es peligrosa, hace que tu rostro cambie de color en cuestión de segundos. –Eres…demasiado…joven–el señor miraba de una manera aterradora al encapuchado y en vez de decir algo simplemente se giró y volvió a la parte trasera del local. Miré a mis alrededores y preferí darle un vistazo a las cosas antes de irme. La señora aún continuaba convertida en piedra y sin recoger las bolsas. –Spike, ¿te gusta algo? – parecía que estaba cansado, ni siquiera había hecho una mueca desde que lo sostuve. –Entonces le preguntaré al pervertido–miré al encapuchado y justo en el instante en que volteaba un resplandor llamó mi atención y por si fuera poco mis piernas comenzaron a moverse por si solas en su dirección. Parecía una palomilla que iba directo a su muerte.
Puse a Spike sobre mi cabeza y tome el objeto brillante entre mis manos. Era un bonito alhajero hecho de cristal, pero no cualquier cristal, un bonito cristal color aqua. Lucía realmente hermoso. Podía notarse a través de el un pequeño motor y las pequeñas cerdas junto a el para tocar una melodía, una melodía que preferí no escuchar hasta llegar el momento adecuado. Pero esa no fue la razón por la cual llamó mi atención, si no por un pequeño símbolo ubicado en la parte trasera de la cajita. El símbolo del Millennium Castle estaba tan perfectamente bien diseñado que incluso hacia alusión de que fue diseñado para alguno de los integrantes del antiguo gremio oscuro. Esa caja debía ser mía. –Spike, no creo en el destino. Pero solo por esta vez creeré en él.
Fui a la caja registradora y solicité el costo de el único artefacto que había mantenido con vida el nombre de mi familia. Quizás no logre encontrar otro igual. Aunque el costo de dicho tesoro me haya caído como balde de agua fría, tuve la suerte de contar con la cantidad exacta para comprarlo. O eso creí. – ¡¿En dónde está?! –grité mientras buscaba la ubicación de mi cartera. No podía encontrarla por ninguna parte. Incluso me puse en cuclillas para buscar en el suelo por si la había tirado pero no se encontraba ahí. Solo espero que no la haya dejado en los baños al momento de cambiar. O peor, que algún lunático quiso pasarse de listo al robarme el dinero que había juntado en mis misiones.
Este día no se puede poner más del asco.
Arcueid Crimson- Rango D
- Mensajes : 165
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
Observe con demasiada atencion como aquella joven de cabellos rubios me miraba cosa que me causaba cierto sudor interno y tensión gracias a que me estaba observando de todo a todo, no era normal sin embargo tenia el presentimiento de que la misma iria a decir algo referente a mi en cosas relacionadas de sexy, o esta raro, es un ladron, cosas asi por el estilo ya que su rostro le delataba al observarme de pies a cabeza-Hick!- De inmediato como que me aleje de ella causando que la mirara sorpresivamente siendo que me quedara algo inmóvil y no supiese que hacer, hasta que menciono que era para ella un juguete…UN JUGUETE SEXUAL!.
OYE, NO SOY UN EXCLAVO SEXUAL....Y MENOS SI SE TRATA DE UNA NIÑA COMO TU!-Decia sorpresivamente teniendo los ojos en blanco para asi esperar la respuesta de la misma, pero al parecer no le importo, todos me miraban alrededor mio de la tienda con ojos de amenaza intuyendo que tal vez llamarían a los del consejo para informarles que había un pedófilo en el local y entraría en grandes aprietos, aun peor, estando con estos trajes no aptos ni acondicionados para aparentar por lo menos ser una persona normal. Escuche entonces su edad.
14 AÑOOOS!-Decia poniendo un rostro comico mientras que mi atmosfera se encontraba en desorden total por la otra gran sorpresa, no lo podía creer, ya esta niña me había metido en un gran lio, no por el simple hecho de que aparentara para mi una joven de esa edad hasta los 16 años, si no por el hecho de todo lo que decía por su gran boquita tan dulce que tenia. De cierto modo me hacia recordar aun mas a Arcueid Brunestud por lo tanto algo me decía que andaba relacionado con ella esta joven y lo que es mas preocupante…tal vez esta joven niña pudiera ser mi hija ya que en esa noche en el hotel no había sido coincidencia que pasase eso que estuve desnudo ante ella en la cama en el hotel donde me hospedaba en ese entonces.
No no debe ser una mentira-mencionaba con un tono de voz bajo, tanto asi, pensaba de Arcueid Brunestud que mi piel sudaba de lo nervioso que estaba y impactado que estaba mientras observaba que era lo que hacia.
Pude notar que había perdido algo siendo que se pusiese en concluyas de inmediato reaccione y movia la cabeza hacia los lados causando que me olvidara por un momento de ese asunto para acercarme hacia ella. –Se te a perdido algo?- Decia mientras miraba aquella joven tan preocupada por aquel objeto que había perdido.
OYE, NO SOY UN EXCLAVO SEXUAL....Y MENOS SI SE TRATA DE UNA NIÑA COMO TU!-Decia sorpresivamente teniendo los ojos en blanco para asi esperar la respuesta de la misma, pero al parecer no le importo, todos me miraban alrededor mio de la tienda con ojos de amenaza intuyendo que tal vez llamarían a los del consejo para informarles que había un pedófilo en el local y entraría en grandes aprietos, aun peor, estando con estos trajes no aptos ni acondicionados para aparentar por lo menos ser una persona normal. Escuche entonces su edad.
14 AÑOOOS!-Decia poniendo un rostro comico mientras que mi atmosfera se encontraba en desorden total por la otra gran sorpresa, no lo podía creer, ya esta niña me había metido en un gran lio, no por el simple hecho de que aparentara para mi una joven de esa edad hasta los 16 años, si no por el hecho de todo lo que decía por su gran boquita tan dulce que tenia. De cierto modo me hacia recordar aun mas a Arcueid Brunestud por lo tanto algo me decía que andaba relacionado con ella esta joven y lo que es mas preocupante…tal vez esta joven niña pudiera ser mi hija ya que en esa noche en el hotel no había sido coincidencia que pasase eso que estuve desnudo ante ella en la cama en el hotel donde me hospedaba en ese entonces.
No no debe ser una mentira-mencionaba con un tono de voz bajo, tanto asi, pensaba de Arcueid Brunestud que mi piel sudaba de lo nervioso que estaba y impactado que estaba mientras observaba que era lo que hacia.
Pude notar que había perdido algo siendo que se pusiese en concluyas de inmediato reaccione y movia la cabeza hacia los lados causando que me olvidara por un momento de ese asunto para acercarme hacia ella. –Se te a perdido algo?- Decia mientras miraba aquella joven tan preocupada por aquel objeto que había perdido.
Mystogan- Rango S
- Mensajes : 12
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
Me había rendido. No encontraba por ningún lado la cartera que procuro tanto cuando salgo de viaje por si algún incrédulo quiere pasarse de listo. Creo que esta vez ese crédulo lo había logrado. Tomé en mis brazos al pobre de Spike que también se había preocupado al verme en ese estado de shock. Creo que tampoco podré comprarle un arma nueva como le había prometido antes de salir. Era una suerte que el encapuchado saliera de su estado de trance y comenzará a preocuparse un poco ante mi situación. Le miré con los ojos lacrimosos de una manera bastante cómica si lo viera desde otro ángulo–No encuentro mi cartera–apenas logré sacar esas palabras de mi garganta que estaba echa un nudo en estos momentos por la conmoción. Coloqué a Spike sobre mi cabeza y me giré hacia la salida no sin antes avisarle a la encargada que me apartara ese hermoso alhajero familiar– ¡No se le ocurra vendérselo a alguien más! ¡Regresaré con el dinero lo prometo! –entonces salí de la tienda dispuesta a buscar la billetera siguiendo los pasos que había tomado.
–Vigila, Spike. Debe estar en alguna parte–estaba caminando hacia atrás para ver si así lograba tener una mejor visualización del suelo mientras Spike me indicaba por donde debía irme si no quería chocar con gente indeseada. Caminé de esa forma hasta llegar nuevamente al baño público que continuaba mostrando una larga fila en el baño de mujeres. Me dirigí a la parte trasera para ver si tenía suerte de encontrar aunque sea una pista de ellas. Nada. Solo pasto y restos de basura. Suspiré bastante desanimada mientras recogía la basura que habían tirado esos humanos que no les importaba su medio ambiente tirándola en el bote más cercano de mí. Solo espero que la persona que haya encontrado mi cartera le de un buen uso y un mejor hogar del que yo le pude ofrecer.
Hoy no era mi día. Debía conseguir dinero sin la necesidad de hacer una misión que me tomaría días en terminarla, además de tener que viajar a otros lugares. Hosenka era un lugar bastante grande, alguien estaría ofreciendo trabajo debido a la cantidad de turistas que estaban saliendo de la tierra en manadas. Una mujer en kimono y exceso de maquillaje se acercó a mí entregándome un pequeño folleto mientras recitaba un Haiku antiguo que reconocí al instante.
La luna y la nieve.
A través de la llovizna
la luz de la mañana.
Dos casas
con las puertas abiertas.
Montañas en otoño.
A través de la llovizna
la luz de la mañana.
Dos casas
con las puertas abiertas.
Montañas en otoño.
Se trataba de un concurso tradicional donde se verían incluidos diferentes temas los cuales irán eliminando participantes por medio de tres famosos amantes de la tradición japonesa como jueces: Inouse Miyami, famoso biógrafo japonés e historiador que ha publicado un gran número de libros referentes a la historia japonesa; Kanrei Soke, bailarina profesional que ahora se encuentra retirada y que además posee su propia escuela de danza para jovencitas; y finalmente, Chitose Fu, actualmente maestro que ha logrado obtener su maestría en pintura Sumi-e. Los temas se darían una vez que el participante se inscriba deseando causar intriga en las personas que desean participar y sorprender al público de manera original. Releí el folleto por segunda ocasión esperando un pequeño empujón que me animara a participar en tal evento. Entonces lo primero que me vino a la mente fue aquel joyero familiar que tanto deseaba. Por suerte venía los premios que se darían a los tres primeros lugares.
1er Lugar: Tres libros autografiados por Inouse Miyima, los antiguos abanicos que anteriormente usaba Kanrei Soke y 2 dibujos originales por Chitose Fu.
2do Lugar: Una beca para entrar a la escuela de danza por todo un año.
3er Lugar: Un estuche de pinturas además de un libro escrito entre Miyima y Fu para aprender Sumi-e.
2do Lugar: Una beca para entrar a la escuela de danza por todo un año.
3er Lugar: Un estuche de pinturas además de un libro escrito entre Miyima y Fu para aprender Sumi-e.
–Si gano, podría todas esas cosas a cambio del joyero–Spike había echo un pequeño ruido–No importa en que lugar quede, son cosas materiales que probablemente jamás usare, excepto por los libros tal vez–tal vez debería pensarlo un poco más antes de participar en dicho evento.
Arcueid Crimson- Rango D
- Mensajes : 165
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
La chica de cabellos rubios no sabia donde estaba la carpeta al parecer, esto causaba que me quedara en demasiada duda pues no sabia del porque su comportamiento, momentos después salio de la puerta mencionando a las encargados de la tienda que apartaran ese articulo, se notaba muy distinta a lo normal en el que se encontraba, cambiando a una niña ocurrente y acosadora a una preocupada por lo que le andaba ocurriendo. Arquee la ceja para notar que algo le pasaba, causando que mejor la persiguiera a escondidas un poco, no sin antes de mencionarles lo siguiente a los sujetos de la tienda-Disculpenme, vere que pasa con esta joven-Me puse de inmediato mis arapos que llevaba en mi cabeza para asi solo dejar en visto mi mirada. Al salir decidi brincar a uno de los tejados de las tiendas para poderla observar cada movimiento y no solo eso, si no para ver si realmente tenia que ver con arcueid brunestud o mi propia hija que desde esa noche de alcoholicos estuvimos para amanecer desnudos en la cama, tal vez pudo haber algo entre nosotros dos y no nos habíamos percatado hasta tiempo después de que ella descubrió ser embarazada por mi. Si seria asi, todo acabaría mal, mi hijo se pondría histérico y tal vez ya no me veria igual, esto me preocupaba bastante y por lo tanto no iba dejar de hecharle un ojo aquella vamipra de cabellos rubios, pero al mismo tiempo, sabia que algo no era normal en ella y que no era mi hija, pero si tenia la seguridad de que tenia que ver con esa chica de raven tail.
Siguiendo observándola desde los techos y sin que se diera cuenta, arqueaba la ceja y cada vez que intentaba encontrar aquel objeto perdido que no tenia idea la chica, reia poniendo mi mano sobre mi boca. Me andaba haciendo un poco en esta noche, sin embargo pude apreciar como una chica tan maquillada se le había acercado solo para darle un folleto, esto me daba cierta curiosidad y por lo tanto la observaba un poco mas para asi poder ver que tramaba en si. Tanta la curiosidad que me mato que me baje del techo donde me encontraba sin que nadie se diera cuenta, quitándome la mascara y ver mi rostro, seguramente las personas ya se habían percatado de que el rey de Edoras se encontraba en este sitio ya que había visto unos guardias pasando por aquellas tiendas donde venden las comidas orientales.
Acercandome por detrás de aquella joven hice lo siguiente volteando mi cabeza a un lado y haciendo el siguiente sonido-ajem-espere un momento a que ella me mirara para asi sonreir ante ella y decirle confiadamente-que pretendes hacer ahora?, a quien iras a acosar o a quien molestaras ahora jovencita-frunce las cejas mostrando una leve sonrisa ante ella y esperando aquella respuesta de la joven para ver que me respondia.
Siguiendo observándola desde los techos y sin que se diera cuenta, arqueaba la ceja y cada vez que intentaba encontrar aquel objeto perdido que no tenia idea la chica, reia poniendo mi mano sobre mi boca. Me andaba haciendo un poco en esta noche, sin embargo pude apreciar como una chica tan maquillada se le había acercado solo para darle un folleto, esto me daba cierta curiosidad y por lo tanto la observaba un poco mas para asi poder ver que tramaba en si. Tanta la curiosidad que me mato que me baje del techo donde me encontraba sin que nadie se diera cuenta, quitándome la mascara y ver mi rostro, seguramente las personas ya se habían percatado de que el rey de Edoras se encontraba en este sitio ya que había visto unos guardias pasando por aquellas tiendas donde venden las comidas orientales.
Acercandome por detrás de aquella joven hice lo siguiente volteando mi cabeza a un lado y haciendo el siguiente sonido-ajem-espere un momento a que ella me mirara para asi sonreir ante ella y decirle confiadamente-que pretendes hacer ahora?, a quien iras a acosar o a quien molestaras ahora jovencita-frunce las cejas mostrando una leve sonrisa ante ella y esperando aquella respuesta de la joven para ver que me respondia.
Mystogan- Rango S
- Mensajes : 12
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Re: Memorias Distorsionadas [Priv. Mystogan]
Estaba observado detalladamente el contenido del folleto por quinta ocasión hasta escuchar un sonido cerca de mi y voltear a ver a la persona que hace unos momentos había dejado en la tienda. No sentí nunca su presencia, este sujeto no me daba nada de confianza. –Ah, eres tú pervertido–le regresé la sonrisa que me había dado cordialmente. Spike solo se limitó a gruñir de manera amena. Respecto a su pregunta:–No realmente. Tengo planeado entrar al concurso para ganar algo de dinero–le entregué el folleto para que lo viese esperando alguna aprobación por parte suya. Necesitaba que alguien cuidara a Spike en mi ausencia y él era la única persona que conocía por esos lares. Porque aunque era la primera vez que lo veía, tenía la sensación de haberle visto mucho antes.
Me puse frente a él y le miré directamente los ojos para hablarle de manera directa, luego me acerqué hasta acortar nuestra distancia–Te necesito–le dije seria y sin mostrar emoción alguna. No sabía como tomaría aquello, pero realmente necesitaba que alguien cuidara de Spike así que puse ambas manos en forma de rezo y me acerqué mucho más a él–Por favor, realmente te necesito–intenté realizar un rostro estremecedor para convencerle más rápido, pero si eso no funcionaba tenía que decirle el porque de su ayuda. Tomé a Spike entre mis manos y lo acerqué hasta su rostro cuidando de que no le alcanzara la nariz en dado caso de que le soltara la mordida. –Necesito que alguien cuide de Spike mientras estoy en el concurso–Spike solo gruñó, como siempre. Volví a colocarlo sobre mi cabeza esperando alguna respuesta positiva. Tal vez un poco de chantaje ayudaría. –Mira si gano, te invitaré algo de cenar con el dinero que gane–ahora solo faltaba que el decidiera lo que pasaría si no ganaba.
El lugar donde debía inscribirme quedaba bastante cerca de nuestra posición. Deje que pensara la respuesta mientras iba a la zona de registros a colocar mi nombre. La encargada estaba igualmente maquillada y vestida que la mujer con la que me había topado. Me miró bastante confusa, bueno más bien a Spike. No debe ser normal traer animales a estos lares. Al finalizar el registro, me entrego un horario y dirección donde se efectuarían las competencias para prepararlas y darles unas horas de descanso. Aparentemente serían seis rondas. Podría quedar en tercer lugar con solo pasar a la quinta. Solo faltaba que el encapuchado decidiera si cuidar o no a Spike, porque no tenía ganas de ir hasta el hotel y dejarlo ahí por tantas horas.
Arcueid Crimson- Rango D
- Mensajes : 165
Fecha de inscripción : 11/04/2015
Temas similares
» Tecnicas de Mystogan Jellal
» Jellal Fernandez Mystogan || King Edoras
» Una noche en el moulin Rouge[Mision Rango C: Arc y Mystogan]
» El miedo a lo desconocido [Priv. Aki]
» No soy un pervertido![Priv. Vanya]
» Jellal Fernandez Mystogan || King Edoras
» Una noche en el moulin Rouge[Mision Rango C: Arc y Mystogan]
» El miedo a lo desconocido [Priv. Aki]
» No soy un pervertido![Priv. Vanya]
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Lun Sep 16, 2024 5:58 am por Ruan Arjurik Minford
» Reencuentro con mi hija[priv.Sarada]
Lun Feb 21, 2022 2:22 am por Dion Laturki
» De la paciencia infinita (Gajeel)
Miér Jun 02, 2021 1:41 am por Gajeel Redfox
» Tecnicas del personaje etc~
Mar Sep 10, 2019 11:47 pm por Gianni Scarlatti
» Ficha de Likulau
Sáb Sep 07, 2019 10:42 am por Ruan Arjurik Minford
» Ficha de wolf horokeu usui
Vie Jul 19, 2019 12:45 pm por Ruan Arjurik Minford
» No hay tiempo que perder (Gajeel Redfox)
Lun Abr 04, 2016 8:18 pm por Gajeel Redfox
» Afiliacion elite resistanceunison
Sáb Abr 02, 2016 8:18 pm por Invitado
» AngieeRenders Foro | Afiliación Normal
Vie Mar 25, 2016 10:19 pm por Invitado